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Doctor Néstor Montezanti                                                              Septiembre 12, 2015

de Indemnizaciones y suspenciones

El kirchnerismo abre en el Consejo un juicio contra un camarista de Bahía Blanca

Montezani, que complicó a Lázaro Báez, sería suspendido por supuestos delitos en los 70

 

Diario La Nación

Septiembre 10, 2015

 

El Consejo de la Magistratura tiene previsto decidir hoy si envía a juicio político al presidente de la Cámara Federal de Bahía Blanca, Néstor Montezanti, acusado por una supuesta vinculación con la Triple A. Todo indica que el plenario va a abrir el jury y va a suspender de inmediato al camarista.

La semana pasada, la Comisión de Disciplina y Acusación del Consejo aprobó un dictamen acusatorio contra él, que fue impulsado por el kirchnerismo y contó con el apoyo del radical Ángel Rozas y la abogada Adriana Donato. Sólo el juez Leónidas Moldes defendió a Montezanti. El otro magistrado que integra la Comisión, Luis Cabral, se abstuvo de votar. Cabral es uno de los referentes de la lista bordó en la interna de los jueces, la lista más crítica del Gobierno. Por todo esto, el escenario es muy malo para Montezanti. Si en el plenario todos vuelven a votar como lo hicieron en la comisión, al oficialismo le alcanza para enviarlo a juicio.

Si además lo suspenden, en la Cámara Federal de Bahía Blanca, que tiene cinco jueces, va a quedar un solo titular. Todos los demás cargos podrán ser cubiertos por subrogantes que designe el Consejo. En esta jurisdicción se investigan acusaciones por facturación falsa contra el empresario Lázaro Báez, socio de los Kirchner. Juan Suris, a quien Montezanti le confirmó el procesamiento, habría emitido -a través de un entramado de sociedades- facturas falsas, algunas de las cuales fueron utilizadas por empresas de Báez.

Según los cargos que se le adjudican a Montezanti, él tuvo "conductas palmariamente incompatibles con la vigencia de los derechos humanos" y "comportamientos indecorosos, arbitrarios y despóticos" con colegas y subordinados.

Montezanti enfrenta en paralelo una causa penal donde fue llamado a indagatoria y declarado rebelde por su supuesta participación con delitos de lesa humanidad. El juez que lo citó, Alejo Ramos Padilla, es un subrogante cuyo nombramiento fue muy cuestionado: para designarlo a él desplazaron a otro subrogante que estaba en funciones, Santiago Ulpiano Martínez. La ley indica que un subrogante debe tener la misma estabilidad en el cargo que un juez titular hasta tanto se cubra la vacante que motivó su designación. La decisión de cambiar a Martínez por Ramos Padilla (juez federal de Dolores, perteneciente a Justicia Legítima) la tomó el kirchnerismo en soledad, con el único apoyo de la jueza Gabriela Vázquez. La Asociación de Magistrados lo calificó como un "inadmisible avance de la política sobre la Justicia".

Entrevistado por el diario La Nueva Provincia, Montezanti dijo que jamás participó de la Triple A y que esa versión fue una "infamia" que usó en su contra "un viejo y tenaz militante comunista" para evitar que siguiera dando clases en la facultad. "Yo lo querellé y gané el juicio. El querellado hizo desfilar a todos sus camaradas de militancia como supuestos «testigos imparciales», y todos dijeron que me habían visto un día que no recuerdan de un mes que no recuerdan a una hora que no recuerdan, del año 1974, junto a unos seis o siete matones que estaban impidiendo con su presencia amedrentadora que la columna de la Federación Juvenil Comunista tomara la facultad", se defendió. Dijo además que contaron que lo vieron en una escalera, pero que esa escalera no existía cuando dijeron haberlo visto allí.

Cuando lo citó a indagatoria, Ramos Padilla sostuvo que Montezanti, además de vinculado con la Triple A, habría participado del secuestro y las torturas de Jorge Riquelme Esparza, de la Juventud Peronista. De acuerdo con la fiscalía, Montezanti había sido Personal Civil de Inteligencia (PCI) del Ejército y conformado "una asociación ilícita" para erradicar y eliminar "toda expresión de activismo político, estudiantil, laboral y gremial contraria a sus ideas".

Ayer, el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, el más tradicional de los colegios de abogados porteños, cuestionó el avance del proceso contra Montezanti. Sostuvo que se estaban afectando "elementales garantías constitucionales del imputado" y que las acusaciones en su contra están "fundadas en procesos precluidos". Pero además, afirmó que "la justicia federal de Bahía Blanca ha sido desarticulada".

"De una manera inversamente proporcional a la celeridad con que avanzan determinadas investigaciones en causas sensibles al partido gobernante, se ha afectado la estabilidad de los magistrados y se ha propinado una grave afectación a la independencia del Poder Judicial", afirmó.

Además del caso de Montezanti, el Consejo tratará hoy la acusación contra Luis Armella, el juez que tuvo a su cargo la causa del saneamiento del Riachuelo. En este caso, el kirchnerismo está más lejos de reunir los votos y abrir el juicio político.

 

Acusación y defensa

 

  • Integrante de la Cámara Federal de Bahía Blanca, la comisión de Acusación y Disciplina del Consejo de la Magistratura aprobó la semana pasada un dictamen acusatorio

  • Si en el plenario de hoy los integrantes del Consejo se repite ese voto, el oficialismo tendría los votos para abrir un juicio político en su contra

  • Se lo acusa de conductas "incompatibles" con los derechos humanos en los años 70 y declarado rebelde en otra causa penal abierta en su contra

  • Montezanti niega haber tenido vinculación con la Triple A y afirma que también otras acusaciones en su contra son falsas

Reportaje de La Nueva (Provincia) a Néstor Montezanti

Septiembre 8, 2015

 

“El sistema de justicia ha traicionado todos los principios”

 

El doctor Néstor Montezanti tiene un estilo duro, directo, y se defiende atacando con argumentos elaborados y sólidos.

En medio de una embestida "pseudo ideológica" contra su persona, el titular de la Cámara Federal de Bahía Blanca rompió el silencio, negó rotundamente que haya pertenecido a la Triple A y afirmó, por ejemplo, que al juez Alejo Ramos Padilla "lo nombraron para perseguir y condenar" y que "la militancia no persigue la justicia sino resultados concretos".

A continuación, los párrafos más relevantes del diálogo que el doctor Montezanti mantuvo con La Nueva.

–¿Después de tantos años de silencio y tantas negativas por qué accedió a esta entrevista?

–Es que un juez debe hablar solamente a través de sus fallos y recurrir siempre a la ley y a la justicia, sustrayéndose de las habladurías y las infamias que se profieren y luego se viralizan. Si ahora rompo con esa norma de conducta es simplemente porque el sistema de justicia al que defiendo y con el que estoy comprometido ha traicionado todos los principios constitucionales.

–Bien, comencemos: ¿ha sido o no partícipe de la Triple A?

–No. Y cuando un viejo y tenaz militante comunista quiso usar esa infamia en mi contra para limpiar la universidad de todos los profesores que se opongan al discurso homogéneo e intolerante de su facción, yo me sentí injuriado, lo querellé y gané el juicio. El querellado hizo desfilar a todos sus camaradas de militancia como supuestos “testigos imparciales”, y todos dijeron que me habían visto un día que no recuerdan de un mes que no recuerdan a una hora que no recuerdan, del año 1974, en el hall de la UTN junto a unos 6 o 7 matones que estaban impidiendo con su presencia amedrentadora que la columna de la Federación Juvenil Comunista que venía marchando desde la UNS tomara la facultad.

"Protestaban porque el gobierno constitucional de entonces había dispuesto la normalización de la casa de estudios, y nombrado a Garófoli, un profesor del Colegio Don Bosco, para esa tarea. De mí se acuerdan porque estaba de saco y corbata. No hacía nada, pero supuestamente me reía y conversaba con los matones. Huelga decir que yo era profesor de la UTN en esa época. O sea que más allá de tanto efectismo, tenía motivos para estar en la UTN, ¿no? Ahora bien, como el edificio de la UTN fue reformado mucho después, resulta que todos los testigos se equivocaron respecto de un dato fundamental: dijeron que los matones y yo estábamos parados en la escalera. Pero cuando describieron la escalera, hablaron de la que está ahora (de cemento y de frente a la entrada), y no la de hace 40 años, que era de madera y emplazada de costado. Pequeño fallido de la memoria. Para toda circunstancia de contexto, los testigos fallaron. De lo único que se acordaron todos fue de Montezanti y de su traje y corbata. ¡Qué originalidad!

"En definitiva, el juez sentenció que era su convicción --y que debía serla la de cualquier observador objetivo y desapasionado-- que Montezanti no ha sido partícipe de la Triple A. Ese juicio fue apelado por el querellado, y la sentencia fue confirmada por todas las instancias y quedó firme. Final de la historia. En 2007 ya la respuesta estaba sobre la mesa. Tuvieron su “Juicio de la Verdad”, lo filmaron, patotearon con su banda de energúmenos y lo único que vagamente intentaron establecer es que me vieron un incierto día de un incierto mes a una incierta hora en mi lugar de trabajo,vestido de profesor, pero en cercanía de unos matones… No merece mayor comentario.

Interesados y aviesos

–¿Y cómo, entonces, insisten desde hace años con la misma acusación, al menos mediática?

__Por la aplicación de una pseudo ideología fuertemente interesada y aviesa, que esconde un tiro por elevación al gobierno constitucional de 1973-76: Montezanti fue abogado de sindicatos peronistas, usa el pelo corto, fue reservista en la colimba, es hijo de un "sumbo", da bibliografía no marxista en la universidad, defendió la causa de Malvinas, es rosista, nacionalista, o sea que debe ser un facho… Entonces, eso de la Triple A, aunque sea un bolazo, se puede instalar impunemente en el imaginario colectivo. Luego viene la etapa siguiente, que es la de repetición dogmática y martilleante. A continuación del nombre Montezanti, viene automáticamente la atribución “perteneció a la Triple A”. Así se instala y se construye el monstruo que quieren mostrar.

–También está lo del Personal Civil de Inteligencia…

–Que es otra canallada. Desde que comencé con la docencia puse en mi programa de estudios en lugar relevante el tema Malvinas, y creo que soy o fui una voz autorizada en la materia, desde el Derecho Internacional Público. Las consultas que evacué sobre el asunto en 1981 y 1982, así como respecto del diferendo con Chile, fueron pagadas con un contrato, por otra parte bastante pequeño. Una vez producida la derrota en Malvinas, inmediatamente renuncié. Nunca hice ningún curso de inteligencia, ni tuve tareas de agente. Fui, tal cual lo dice el legajo, “Asesor Universitario”. Y fui el único. No es un eufemismo, sino una fuente de pago de honorarios. Mucha gente, muchísima, ha cobrado y cobra honorarios desde los servicios de inteligencia. Muchos profesionales, abogados, contadores, etc., son contratados desde los servicios de inteligencia, seguramente por cuestiones presupuestarias. Pasa y ha pasado siempre. Más allá de que no entiendo por qué es pecado trabajar en el sector de inteligencia. Es un servicio necesario del Estado, en particular en cuestiones internacionales como las que me solicitaron en su momento.

–¿Y qué pasa con la aparición, ahora, en el nuevo juicio que lleva adelante Ramos Padilla, de un enfermero del Hospital Municipal que lo sitúa a usted, en 1977, como un interrogador en el V Cuerpo de Ejército?

–Lo que pasa con estas cosas es que van apareciendo nuevos testigos que de pronto, luego de 40 años, recuperan la memoria, se “iluminan” y recuerdan algún hecho puntual. Generalmente, las personas que deberían corroborarlos están muertas, y entonces habrá que creerles a los repentinos iluminados. En este caso, al enfermero se le escapó el corroborador fundamental. Cuando lo nombró habrá imaginado que tampoco estaba aún entre nosotros. Pero se equivocó. Está vivo y ya desmintió las invenciones. Lo ofrecí como testigo en el juzgado, pero, por las dudas, también hicimos una testimonial ante escribano.

"Más allá de eso, el enfermero comete otros errores que desnudan que está mintiendo. Dijo que en 2003 fue a la Cámara Federal a consultar los padrones electorales, pero jamás en la Cámara hubo padrones electorales. También habla de un anillo de sello (dato de color que debe haber construido a partir de la foto que todos estos sitios virales de la web reproducen de mi persona, justamente sacada en el juicio que les gané en 2007). Ocurre que ese anillo, con mi escudo familiar, no lo tenía en 1977. Es de junio de 1982, luego de que el Instituto Genealógico Italiano me remitiera los resultados de la investigación heráldica del caso.

Ante escribano

–¿Por qué debe “asegurar” testimonios ante escribano? ¿No debe tomarle declaración el juez?

–Sí, por supuesto. La constancia notarial es sólo una pequeña salvaguarda, que debo tomar en atención a las rarezas de la persecución obstinada que se enderezan en mi contra. En primer lugar, cuando lo remueven a Santiago Ulpiano Martínez, designan en reemplazo al juez federal de Dolores, violando la propia ley K de subrogancias (más allá de que esta está tachada de inconstitucional por varias sentencias en todo el país), que dice que el subrogante tiene que ser de la misma jurisdicción donde va a prestar funciones.

"Pero, además, ese subrogante se hace cargo acompañado de una banda de personas, venida de afuera, que virtualmente interviene el Juzgado Federal 1, relegando a los empleados judiciales de la planta. Entre esa banda está un tal Vassel, ya encartado por falsificación de pruebas en una causa sobre presuntas torturas a conscriptos en Malvinas. La maniobra se pudo desnudar cuando uno de los procesados, que hoy es periodista, visitó en Corrientes, en sus casas, a cada uno de los exconscriptos y filmó el encuentro. Ahí los tipos se mostraron azorados por los testimonios que supuestamente habían prestado y con los que se construyó la causa. Todo era mentira.

Repudian condena  que obliga a docente de la UNS a indemnizar a Montezanti

A partir de un fallo de la Cámara de Apelaciones, el profesor José Dante Patrignani deberá pagarle 70 mil pesos por supuestas calumnias al juez Néstor Luis Montezanti
 
Agepeba.org
 

Asociaciones de los derechos humanos, agrupaciones políticas, docentes y estudiantes se movilizarán este lunes para repudiar un fallo de la Sala I de la Cámara Federal de Apelación en lo Civil y Comercial contra José Dante Patrignani, profesor y gremialista en la Universidad Nacional del Sur (UNS).

Patrignani fue condenado a indemnizar con 70 mil pesos al camarista de ese mismo fuero, Néstor Luis Montezanti, por difundir afiches con un fotomontaje que lo mostraban usando una gorra militar.

El nombre de Montezanti aparece en la lista del Personal Civil de Inteligencia que integró el Batallón 601 durante la última dictadura cívico-militar. Según consta en la primer foja de su legajo personal, ingresó al servicio avalado por el genocida prófugo de la justicia argentina José Osvaldo “Balita” Riveiro, condenado en Francia por su participación en el Plan Cóndor. En su declaración, dijo conocer a Montezanti desde el año 1975, cuando integraba la Triple A.

Luego de hacerse público el listado por decreto presidencial, la Asamblea Universitaria (AU) de la UNS aprobó una resolución que declara “que la participación en esa tareas de inteligencia esta reñida con toda norma ética y moral aceptable dentro de la comunidad universitaria en particular y en el marco ciudadano en general, quedando comprendida en las causales de impugnación de los artículos 21 del Reglamento de Concursos de Profesores Ordinarios”.

Sucede que Montezanti, además de integrar la Justicia Federal de Bahía Blanca, tiene a su cargo como titular tres cátedras en el Departamento de Derecho de esa casa de altos estudios.

Patrignani, profesor del Departamento de Física, secretario Adjunto de la Asociación de Docentes de la UNS y asambleísta por la Lista Integración, promovió el 3 de octubre de 2011 el juicio académico contra Montezanti para que sea separado de sus cargos, fundado en las causales de falta de ética reconocidas por los reglamentos universitarios y la resolución de la AU.

El camarista recurrió a la justicia impugnando la resolución de la Asamblea y obtuvo una cautelar que mantuvo suspendido el trámite de juicio académico durante más de dos años. Sin embargo, la Suprema Corte de la Nación, en mayo de este año, rechazó la impugnación de Montezanti y quedó sin efecto la cautelar que lo protegía.

Se constituyó entonces la Coordinadora por el Juicio Académico a Montezanti integrada por distintas organizaciones y militantes que mantuvo el reclamo con declaraciones, escarches y afiches. Uno de esos afiches es por el que condenan a Patrignani.

“Mientras transcurre en nuestra ciudad la tercera etapa de los juicios por delitos de lesa humanidad, la impunidad que gozan algunos de los partícipes del siniestro mecanismo de la represión durante la última dictadura, sigue pesando sobre los militantes populares”, explicaron desde la Comisión de Apoyo a los Juicios, antes de la movilización de este lunes que se realizará bajo la consigna “la impunidad sigue dando cátedra en Bahía Blanca”.

Desde la CTA local, junto a agrupaciones políticas, docentes y estudiantiles, también se solidarizaron con Patrignani y reclamaron “la anulación de este fallo aberrante y el fin de la criminalización de la protesta social”.

 

Desde el Respeto y la Corrección

 

Dr. Néstor Montezanti,

 

Veo que el 11 de septiembre del año 2015, pasó finalmente a ser noticia en los grandes diarios nacionales.

Durante estos últimos años, usted mantuvo un muy bajo perfil judicial por más que observara como cometían hechos de prevaricato con otros acusados por delitos de Lesa Humanidad. Solo eran ex uniformados y culpable o no, mediante falacias, también me detuvieron el día 28 de Noviembre del año 2014.

Como residente de larga data en Bahía Blanca, supongo que sabe de mi conducta de funcionario

 

Plata Sucia

También leí que había tenido éxito en acciones legales reclamando ser indemnizado por daños morales sufridos en relación a estas causas  en las imputaciones de las que hoy es objeto. Le diré que me gustaría suponer que ese dinero lo destinará a solamente a donaciones a quien realmente necesite. Es dinero sucio, manchado de sangre y producto de sufrimiento de seres humanos. Es denigrante lucrar con el mismo como ha hecho la "juventud maravillosa" que como despreciables carroñeros se alimentaron y lucraron con recursos de los necesitados, simulando en numerosos casos haber sido víctimas cuando de verdad fueron todo lo contrario.

Usted tuvo la suerte al igual que otros miembros del poder judicial a no ser detenido y seguramente contará con un muy buen estudio de abogados que lo defenderán a más y mejor, reforzando los conocimientos que por título y función ya tiene. Debo destacar la generosidad del diario La Nueva (Más conocido como La Nueva Provincia) que no solo no censura su palabra, sino que le permite gratuitamente expresar su verdad, ya que ni pagando, este medio ha tenido esa cortesía hacia mi persona.

  

No golpear al caído

A pesar de ello, hoy existe gran factibilidad de que a futuro, nos encontremos en alguna prisión ante la posibilidad de su inocencia y sabiendo en carne propia como actúa la "justicia" no diré que me alegra lo que le está sucediendo. Me considero un hombre de bien.

También supe que a diferencia de quienes hoy sin escrúpulos por ambición, obsecuencia o ideología imponen "el relato" que NUNCA HAY QUE GOLPEAR AL CAIDO, PORQUE ESTE SE PUEDE LEVANTAR.

Atentamente,

 

Claudio Kussman

El Abandono del Derecho

Roberto Azaretto 

Integrante la Academia Argentina de Historia

Periódico Los Andes. Septiembre 11, 2015

 

Hace más de veinte años, en una de sus últimas colaboraciones en el diario La Nación, el intelectual español Julián Marías, manifestaba su preocupación por una tendencia creciente a "abandonar el derecho", en diversas sociedades. 

Ése es un problema que se agudiza en la Argentina en los últimos doce años, donde causas nobles como la de los derechos humanos, se utilizan como herramienta de distracción para dedicarse a saquear al país, por parte de las oligarquías gobernantes y para violar principios jurídicos esenciales para la vida en un Estado de derecho y remplazar la Justicia por la más descarada venganza.

Cuando se dice "juicio y castigo" se está violando el derecho pues debería exigirse "juicio y sentencia", haciendo recordar esos añejos westerns donde la partida que capturaba al sospechoso decía: "Tendrás un juicio justo, te colgaremos".

Carlos Nino nos recordaba, en los ochenta, que la Argentina se había acostumbrado a vivir fuera de la ley. Esto se ha ido acentuando y una de las evidencias es la falta de igualdad ante la ley, principio fundamental en los valores occidentales que en una larga lucha buscaron formas superiores de convivencia civilizada.

Más de mil personas son hoy presos políticos acusados de hechos que no pueden probarse: ex funcionarios, ex jueces y fiscales sin prueba alguna están en la cárcel o en detenciones domiciliarias o procesados con acusaciones falsas y, en muchos casos, los fiscales y jueces que llevan adelante esos juicios, han sido colaboradores exaltados de la dictadura militar.

Por miedo a los carpetazos, por cargos para familiares y presiones diversas, muchos integrantes del Poder Judicial han claudicado de su compromiso con el derecho, como lo hacen los que apañan la corrupción y los fraudes electorales.

Mientras tanto, personajes siniestros como el general Milani, son protegidos por la Justicia con sede en Tucumán por los mismos que, sin pruebas, acusan a ex magistrados de prestigio en el Norte.

Ha habido una campaña contra los escasos civiles que ejercieron funciones en el régimen militar, pero no hay ninguna causa contra la ministra Alicia Kirchner, subsecretaria de Acción Social de Santa Cruz, durante todo ese ciclo.

En los juicios que impulsó el presidente Alfonsín, fueron condenados los integrantes de la Junta Militar, pero también el jefe de la Triple A; no olvidemos que entre 1973 y el golpe de 1976 hubo más de dos mil asesinatos, y que el jefe de una de las bandas terroristas fue Firmenich. 

Hubo un consenso, cuando se inició la democracia, que la década de los setenta fue la peor de nuestra historia y que nada había que rescatar de ella. Pero a partir de 2003 Néstor Kirchner, que compartía copas con los jefes militares de la guarnición de Río Gallegos durante la dictadura, utilizó la cuestión de los derechos humanos de ese tiempo como pasatiempo para disimular la construcción de su poder feudal y dinástico.

Los derechos humanos constituyen uno de los grandes aportes de la tradición liberal, que fue la inspiradora de las instituciones de la República desde los padres fundadores y que recoge el concepto judeo cristiano que el hombre como criatura creada a imagen y semejanza de Dios, es sagrado y por lo tanto un fin en sí mismo y no un medio.

Un contraste con el pensamiento de Mussolini, no muy diferente al de Stalin : "Todo en el Estado, todo para el Estado, nada fuera del Estado, nada contra el Estado." No es el Estado para las personas sino las personas para el Estado,

Los derechos humanos son un problema vigente, no una cuestión del pasado cuando desde uno y otro lado se abandonó la idea de la confrontación de ideas y el debate de proyectos dentro de la democracia por distintas formas de dictadura, de la castrista o la franquista, provocando un baño de sangre argentina.

Los derechos humanos siguen siendo violados en el país con el fraude, las torturas, las policías corruptas, la complicidad de las oligarquías políticas con el narcotráfico y el tráfico de personas y con el sometimiento de la Justicia.

El gobierno ha demostrado indiferencia con las violaciones a los derechos humanos en países de la región y busca la alianza con ellos o potencias extra continentales cuyos regímenes pisotean la libertad y la dignidad de las personas.

Los derechos humanos tienen vigencia cuando se aplican a todos, a los amigos y a los adversarios e incluso a los enemigos y no se aplican normas con efectos retroactivos. Por eso la estatua que simboliza a la Justicia la presenta como una mujer con los ojos vendados.

Para finalizar vale recordar palabras de esa gran jueza de la Corte Suprema recientemente fallecida, Carmen Argibay: "La tarea de un buen juez de la Corte es antipática por naturaleza, porque para ser un buen juez nuestro primer deber es ser desagradecidos con quién nos nombró, estrecharle la mano, con educación, agradecerle el cargo y no volverlo a ver".

Esta jueza fue encarcelada en la noche del 24 de marzo de 1976 y estuvo presa en el Penal de Devoto hasta fin de ese año, sin proceso alguno. Sin embargo, en el caso sobre la constitucionalidad del indulto que beneficiaba al general Riveros votó en disidencia sosteniendo la vigencia del mismo pues entre la duda por favorecer la impunidad creyó más importante la vigencia del precepto constitucional que garantiza el derecho fundamental de las personas a no ser juzgadas dos veces por el mismo delito.

“Ese precepto -decía Carmen Argibay-debe estar por encima de mis ideas y gustos personales".

Hoy muchos de los acusados sin pruebas, no tienen la suerte de ser procesados ante jueces de la formación jurídica ni de la entidad moral de la ex jueza de la Corte.

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